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Liam es un chico sencillo, sociable, despreocupado. Todo en su vida parece ir bien, por lo que no se estresa demasiado: tiene amigos, tiene una novia que ama, tiene una familia tipo, no tiene preocupaciones. Bueno, quizás debería preocuparse un poco por sus calificaciones en Historia de la Magia, Pociones y Aritmancia, pero no es tan importante. Lo importante es aprobar sin pasar un mal rato.
No le gustan las cosas innecesariamente complicadas, no le gusta el drama ni tampoco quiere ser parte de nada que pueda terminar siendo problemático. Aunque tiene un hermano menor en su misma casa no es particularmente cercano a él, y le gusta tener sus propias cosas, ser independiente. Todo esto es una forma de decir que a Liam no le gusta compartir, especialmente si siente que debe hacerlo. Prefiere quedarse sin el pan y sin la torta si tiene que compartir o ceder alguno. No, gracias.
Familia:
Sus padres son esas parejas que parecen nunca cansarse uno del otro, porque cada momento libre que tienen quieren pasarlo juntos. Sheryl es una bruja cuya sangre no debe ser muy pura, porque su familia no tiene un árbol genealógico muy cuidado ni tampoco un apellido muy particular: Smith. Sin embargo todos los parientes de Sheryl poseen poderes mágicos, por lo que se crió en un ambiente bastante ajeno al mundo de los muggles. Egresó de Ravenclaw y se dispuso a trabajar en la tienda de alimento de mascotas de sus padres mientras decidía qué estudiar.
Fue en esos años de indecisión que, con lo que había ahorrado trabajando en el negocio de sus padres y durmiendo bajo su techo, que decidió gastarlo todo en viajar. Y así, en un tren muggle que salió de la estación de Paddington con destino a una agencia de viajes, conoció a Brian Eastaugh. Ella al principio no estaba muy segura de querer salir con un muggle, pero el encanto de él logró convencerla para darle una oportunidad. No viajó nada.
Se enamoraron, se casaron, y ella compartió su secreto con él. Él sospechaba que ella tenía algo raro, así que eso explicó varias cosas, lo que solamente hizo que se quisieran más. Tuvieron dos hijos: Liam en el '73 y Devin en el '75. Sheryl abrió su propia tienda de comida de mascotas, donde se especializa en recetas gourmet para criaturas mágicas. Brian es cartero. Viven en una casa de tres habitaciones en Brighton, en un tranquilo vecindario muggle.
Altura: 172cm
Apariencia:
De estatura normal para un chico de su edad, en crecimiento. Es delgado, aunque todavía siente que tiene 'grasa de bebé' en el rostro, haciendo que sus facciones todavía tengan algunos dejos más infantiles de lo que él quisiera. Tiene el cabello castaño, que puede ondularse si lo deja largo (y por eso lo mantiene corto), y los ojos avellana. Siente que tiene la frente más grande del mundo y las ojeras más oscuras de Bristol.
Para vestirse es sencillo, pero prefiere el uniforme para no tener que pensar demasiado en lo que se pone. No es inusual verlo usar el pantalón del uniforme los fines de semana, porque le da mucha flojera buscar algo más para ponerse. Lo que sí detesta es usar la camisa, entre los botones y el color blanco no sabe qué le molesta más de esa prenda en particular.
No sobresale por entre sus compañeros, ni tampoco desea hacerlo. Al menos en la adolescencia su plan es ser uno más y sobrevivir la escuela.
Algo más:
Le gusta el Quidditch para ver, y el Quodpod para jugar. Por alguna razón su familia materna son de jugar al quodpod, así que es lo que se acostumbró a jugar durante su infancia. Con respecto a los deportes muggles, solía ir a clases de tennis con su hermano cuando eran pequeños, pero dejó de asistir cuando ingresó a Hogwarts.
Ama a su novia, Rachel Sullivan.
Su mejor amigo es Garrett Stanley.